En esta ocasión no considero que lo más idóneo sea hablar de enfermedades, aunque motivos tengo para ello, ojalá no...pero ya llegará el momento, estoy muy seguro.
Pido perdón por la pésima calidad de las fotos, pero como muchos días de este lluvioso y duro invierno, parece ser que este no era un día muy apropiado para sacar fotos, también reconozco que la cámara de mi mamí tampoco es muy allá, aunque la tiene como su más apreciado tesoro, según ella es corrientilla y tiene que durar una eternidad, aunque lo dudo mucho.
Hoy voy a hablar de cigüeñas y de intrusos, la primera es ella, la cigüeña del camino y los segundos somos nosotros, los intrusos...
Lo cierto es que poco le importa a ella, ¿que temor puede tener a dos super voluminosos de cuatro patas?
Como podéis ver, no le importa a ella, le da igual que escasísimos metros nos hayamos topado con ella.
Pasea lentamente, se gira, ni se inmuta....
Eso si, nos mira de reojo....
Yo no la miro de reojo, la miro de frente, solo siento curiosidad por ver como se mueve ese ser tan raro, desgalichado, de gran pico y patas extremadamente finas y largas, incluso más largas que las mías y ya es decir....
Oigo detrás de mi un sinuoso ¡¡ SSSSHHHHHH......!!
Y una voz que me dice:
-¡¡cuidado Tato, no hagas ruido, que si lo haces, tendrá miedo!!
Y como sé muy bien lo que es el miedo, no quiero que nadie lo tenga, así que me doy la vuelta y me quedo paralizado, un buen rato, no muevo ni un músculo.
No debo hacerlo, ni hacer ruido, ni movimiento alguno, ella se puede asustar y no quiero.
Como pasa el rato, ella no se mueve, no ocurre nada, simplemente está ahí y yo me aburro, así que me pongo a lo mío....
Pero por ahí viene Ron y esté según piensan los cree sabelotodo del mundo de la caza, los goldens retriever son muy buenos para cazar aves y puede ser muy peligroso, os aseguro que a mi mamí no le tiemblan las piernas por ello, ella si que sabe quienes son los que cazan y el porqué lo hacen...
Pero a Ron, el caza aves, ni fu, ni fa....como yo, solo siente curiosidad y admiración por ella...
Después de bastante rato sin movernos, esperando a ver la actitud de esta preciosa ave, vemos que con ímpetu abre las alas y toma vuelo hacia su casa...
Y aquí vive ella...
Yo sigo a lo mio....
No es una casa muy segura, por eso muchas veces nos hemos encontrado con la desagradable imagen de ver a más de una electrocutada..
Es su vida, allí hacen los enormes nidos, se enamoran, viven en pareja y tienen a sus polluelos...
A veces pasean por las calles de mi pueblo, miran escaparates y nadie las interrumpe...
Solo las admiran...
Aunque se toman medidas para que no salgan a la calzada, especialistas las recogen y después son llevadas a su hábitat, donde tienen sus enormes nidos.
Y después del paseo, todos soñamos con esas finísimas y majestuosas aves "las cigüeñas".
Nosotros vivimos muy cerca de ellas, nos parecen una preciosidad y aunque tengamos cuatro patas, siempre, siempre, las respetamos, porque ellas son nuestras vecinas.
Hasta la próxima
"Lametones de Tato"
Amigo tiene que ser muy chulo tener unas vecinas así!.Si te soy sincero,yo no me hubiese estado tan quietito como vosotros,salgo por patas tal cual veo a tremenda ave!. Es que es lo que tiene ser pequeñajo,que se ve todo muy grande arf arf. A mami la has enamoraod más si cabe,con tu foto de primer plano,que tienes un morrito para llenar de besos y achuchones dice...
ResponderEliminarYo te mando un patiabrazo!
Dark, en primer lugar decirte que siempre estás en nuestro corazón, cada vez que a mi me viene un achaque, pensamos también en los que te puedan venir a ti, pues los años no perdonan y los dos rondamos por la misma edad.
EliminarNo me creo que hicieras mención de ir tras las hermosas cigüeñas, ya que todo es cuestión de acostumbrarse como nosotros que las vemos a diario, ellas viven en nuestro entorno y es bonito ver como viven.
Cuidaté mucho Dark, aunque eso es seguro con los papís que tienes.
Un enorme patiabrazo de tu amigo
Tato.
¡Que bonita entrada, Tato! son preciosas las cigüeñas y yo toda la vida las he tenido un especial cariño, pues nací el día de San Blas y ya sabes lo que dicen de ese día y las cigüeñas. A mí me lo repetían mil veces de pequeño, cuando cumplía años, por lo que les cogí cariño desde crío. Me alegra que esta historia de esa belleza voladora, terminara bien. ¡Y que graciosa esa mirando escaparates! :)
ResponderEliminarY es verdad, como dice Dark, que da gusto verte en esos primeros planos, especialmente, me gusta mucho el primero, de perfil, se aprecia con tanta claridad el pelo, que parece que se te puede acariciar y besar.
Me ha gustado mucho también ver a Luna y a Ron. Dales un beso, por favor.
Y otro para ti y ya sabes quienes.
Alberto, reconozco que tus entradas son las mejores, de eso no hay ninguna duda.
EliminarYo no nací el día de San Blas, o quizá si, quien sabe?? pero cada día a las cigüeñas veo, tengo la gran suerte de convivir con ellas, no existe un día que nos topemos de frente con alguna y es una maravilla poder comprobar lo enormemente hermosas que son, si vienes algún día lo podrás comprobar.
Mi cara ya no es lo que era y mis huesos tampoco, las canas son el vivo reflejo de una vida extensa, con momentos duros y amargos pero también muy dulces, los últimos son los que sin duda me llevaré, ya qué mi corazón se irá rebosante de todo el amor que tanto mi familia como mis amigos me han dado.
Besos y lametones
TATO.
No soy demasiado viejo, 49 años, pero aunque todos los días aprendo algo, ya tengo la experiencia suficiente para vivir cada día sin pensar demasiado en el mañana. Los cachorros son siempre preciosos, pero mi primer contacto con los galgos fue con una perra, blanca y negra, con un tremendo corte en el cuello para arrancarle el microship, de 12-14 años de edad. Fue adoptada en Finlandia, donde conoció lo que es una familia antes de fallecer. Cuando la acaricié por primera vez me transmitió una paz y ternura que jamás olvidaré, padeciendo desde entonces de galguitis. Siempre me han producido admiración los animales de cierta edad, como tú amigo TATO: vuestra elegancia, calma, pillería y agradecimiento son virtudes y valores que no tienen precio.
EliminarSaludos muy cariñosos desde Granada.
Pedro, Sancho y familia
Pedro, entiendo perfectamente lo que dices porque yo también lo siento así.
EliminarHace casi 6 años, decidí adoptar un galgo, y sin tan siquiera ver ni una foto de él, llego a casa Tato, era ya muy mayorcito y es difícil de explicar lo que sentí la primera vez que lo vi, solo yo lo sé....
Al principio era incapaz de mirar a ningún ser humano, el mirar a un hombre ya era superior a sus fuerzas, poco a poco fue dirigiéndome miraditas, solo a mí, temblaba cuando lo hacia, pero él sabia que yo lo había sacado de esa vida tan dura, me miraba de una manera que veía en él lo inmensamente agradecido que estaba por todo, por las caricias, por las dulces palabras.... sus ojos reflejaban sumisión, fidelidad y muchísima bondad y a día de hoy, Tato me sigue mirando de la misma manera, aunque como tu bien dices, ellos saben también hacer de las suyas y no son solo largos de longitud, si no de saber conseguir lo que quieren y si hace falta estirarse y agarrar un bocata de la cocina lo hace, eso si...se lo esconde por si algún día el hambre aprieta, pero son tremendamente astutos y por supuesto preciosos.
Y que si esto es padecer "galguitis" bienaventurada sea, lastima lo que se pierden los que no los quieren conocer, yo dudo que pueda pasar sin tener a uno de ellos a mi lado, creo que por vida, formaran parte de mí.
Gracias por seguir a Tato, que pena que el pobre ya solo pueda contar lo tranquilita que es su vida, ya poco puede hacer, solo estar relajadito y bastante reposado.
Gracias Pedro y cuida mucho de los tuyos, en especial Sancho, que ya a entrado en añitos.
Tato y familia.