Viviendo la navidad esperando un langostino....

Felices fiestas a tod@s, os aseguro que para mi no lo son, mi mamí mucho homenaje de cumpleaños y todavía no he catado ni un langostino, ni turrón, ni mucho menos un blandito polvorón..... con lo que me gustan!!

Este año hemos sido sometidos al abandono total la noche del 24 de diciembre, sufriendo la cruel tortura de hacernos sentir la alegría, los villancicos y los olores de las gambas a la plancha en la casa del vecino, la mia triste, vacía y llena de perros y gatos solitarios.

Eternas fueron las horas, hasta que a las 4 y media de la madrugada oímos girar la llave en la puerta de casa y cuando en mi estomago ya no quedaba ni  rastro del plato de pienso que me habían dado 7 horas antes....no se les ocurre otra cosa que seguir la diversión a mi costa.

Estoy enfadado desde entonces, así que desde esa maldita noche esta es la cara que tengo, la cual no pienso cambiar hasta que no me hagan sentir la navidad con un buen langostino.

Por este motivo voy buscando en el camino y siempre encuentro, aunque solo sea un mendrugo pequeñito de pan, eso si.... para guardar debajo de mi colcha. 

¿Me puede decir alguien donde está la gracia de estas fiestas?

Mi mamí lleva todo el mes secuestrada dentro de este lugar, en el cual jamás he podido entrar y no es porque no admitan la entrada de perros, todo lo contrario, muchos de ellos han entrado en el, pero yo soy incapaz, esas figuras gigantes e inertes me ponen nervioso y no solo están esas dos, sino cinco más como esas....

Así que los largos paseos por el campo se han convertido en.....tristes, aceleradas e insulsas vueltas de 10 minutos, de este modo todo se limita a ....¡¡venga Tato, orina rápido que es tarde!!!

 

Y ahora quiero dar las gracias a nuestra gran amiga y seguidora Laura, que desde Madrid me ha mandado un precioso regalo,
Ella es la autora de estos magníficos blogs:

Borboleta su blog de jabones, ella misma es la que los hace y merece la pena que echéis un vistazo solo para sentir la delicadeza de su gran trabajo.
Food & Life su blog de cocina, (siempre pienso que es una lastima vivir tan lejos), mejor comprobar vosotr@s mism@s por que lo digo.

Desde aquí Laura.... muchísimas gracias y que conste que no me dejaron dar ni un bocadito chiquitín a tus jabones, pero muy a gusto lo hubiera hecho.

Por ahora hasta que la vida se normalice y me den un langostino muchos

Lametones de Tato

Y sobre todo no os olvidéis de los abandonados, de los que esperan su final en las perreras, de los refugios y de los que esperan tener la misma suerte que tuve yo, os aseguro que cuesta poquito, que damos poquito trabajo, más bien ninguno.